Que ganas tenia de llegar a mi casa!!!! Encontrarme con mi familia, amigos, lugares, olores, colores, gente, paisajes, en fin....todo lo conocido.
Fue una llegada simple, discreta, vamos normal, pero para mí muy importante, ya que marca el fin de una etapa y el comienzo de otra.
Profesionalmente me ha curtido, habiéndome proporcionado de un sinfín de experiencias, con personas, empresas, organizaciones y como no de experiencias de un país tan interesante como Panama, pudiendo afrontar nuevos retos a partir de ahora con la tranquilidad de esa visión global que te da el haber conocido otros países, y el haber trabajado en ellos en obras importantes, habiendo conocido otras formas de trabajar, otros métodos, otras personas.
Mi experiencia en Brasil, me dio la oportunidad de conocer ya no un idioma, el portugués, que hablo sin ningún problema, sino una forma de pensar más global y el saber que hay formas de hacer lo mismo que haces tú pero mirado desde otra óptica, eso te hace grande.
Mi experiencia ahora en Panamá, aparte de ayudarme a continuar ampliando mis horizontes profesionales y crecer como persona, me ha servido para acumular la experiencia suficiente para acometer mis próximos retos profesionales ya a la vista.
Como decía al principio, mi encuentro fue bueno y muy deseado, ya que llevaba tiempo sin pisar nuestra amada patria, pero el desencuentro fue más bien no tan bueno.
La sociedad que me encuentro no es la que más me gustaría haberme encontrado, paro y desempleo por las nubes, inseguridad laboral por todas partes, en medio de un inminente cambio de tendencia política en el país (es a lo que apunta), conflictos por recortes salariales y laborales a los profesionales de la sanidad y la educación, entre los más nombrados.
Vamos, un panorama que no ayuda al optimismo. Esta situación me produce un gran choque interior y desconcierto, ya que vengo de Países con los mejores índices económicos del momento, y no logro quitar de mi pensamiento que es lo que ha pasado realmente en mi país para que estemos así.
Comparo lo que me encontrado aquí y allí de donde vengo o he tenido la oportunidad de conocer y vivir, y no concibo como se ha podido llegar a esta situación aquí en España. Aunque también han existido retrocesos económicos, en Panama sobre todo, pero según lo hablado con gente local entendida en los temas comentados, y siempre hablando bajo el punto de vista del mundo que mas conozco que es el de la construcción; no ha habido ese despilfarro macroeconómico sino una previsión y mejor Gestión de lo que te podías gastar e invertir.
Con lo que desde mi ignorancia económica, y nada versado sobre temas políticos, creo que no se hicieron bien las cosas y se contribuyo a engordar esa gran mentira financiera en la que todos sabemos cómo acabo.
La solución????, no tengo una varita mágica, pero no confío ni en nuestros dirigentes ni a sus soluciones, hace muchos años me sentía identificado con cierto partido político caído ya hoy en día en desgracia y carente de ideas, todas huecas de significado y mensaje, con lo que hoy en día no creo en política, así que no me queda más remedio que creer en mí mismo, en la persona, en el hombre, aquel que con su esfuerzo pueda ayudar a mejorar una situación ya de por sí difícil.
Mis nuevas expectativas, al igual que las de muchos de mi profesión, pasan por estar fuera de nuestro país, por eso que mi nuevo destino me lleva otra vez a estar fuera de mi casa, de nuevo un gran reto importante porque cambio otra vez de registro con nuevas situaciones, nuevas formas de ver y hacer, pero con el absoluto convencimiento de poder hacerlo bien y con la tranquilidad que me da el haber estado ya fuera por mucho tiempo.
Porque como dije anteriormente todos los que han provocado esto, nos obligan a desarrollarnos fuera ya que si quieres progresar, seguir estando ahí, tienes que salir fuera de donde naces, lejos de lo conocido y dar tu esfuerzo, trabajo y dedicación a otro país, otra economía, la cual seguirá creciendo gracias a nuestra aportación profesional a ser y tener esos índices económicos que tanto anhelamos para nuestra querida España.
No cabe duda, que esto volverá a sus cauces, seguro que ya nada volverá a ser igual como antes, pero lo que tengo clarísimo, es que en épocas de vacas flacas es cuando sale a relucir lo mejor de cada uno de nosotros, es cuando se debe pensar en no las veces que te caes, sino en las que te levantas con más ganas que antes para emprender, ser diferente, adaptarte a los cambios, si eres empresario, tienes que liderar esos cambios y estar ahí delante con la gente que tienes en tu equipo, y primero un paso y después otro.
Pero con decisión y optimismo, siempre con optimismo!!!!!